sábado, 23 de febrero de 2019

Microcrónica literaria de la 4ª noche de Preliminares del #COMBA2019

- Bienvenido a la clínica Operación Triunfo, pase a la sala de espera, por favor, enseguida le llamamos.

Tras dar las gracias con media voz, y agarrando el paquete de pañuelos para enjugarse las lágrimas, entró en el cuarto que le había indicado el celador. Había otras dos mujeres.

- Buenos días, ¿la última, por favor?
- Yo misma- dijo una de las mujeres, la que llevaba las manos encadenadas.
- Muchas gracias, entonces, ¿suponque usted será la primera mujer?- era una obviedad, pero tenía que confirmar la teoría.
- Así es, yo ya estaba aquí desde que se abrió esta clínica, y me he hecho tantos retoques que nadie me reconocería. Aunque tienen que reconocer que, siendo inicialmente una costilla, he ido a mejor.
- Las cosas como son, señorita, tiene muy buen aspecto.
- Gracias, pero aún así, seguiré viniendo, las veces que haga falta. Solo espero que el cirujano también esté esos días. De momento, me han confirmado ya la cita de la semana que viene. Amiga, ¿y tú por qué llevas esas cadenas? ¿No serás una esclava- y se rió con esa ocurrencia, pero al momento calló al ver el gesto de la otra mujer.
- Podemos llamarlo así, pero no es estrictamente cierto. Yo vengo a operarme una mancha extraña que tengo en la espalda, tiene varias tonalidades y, si se fija bien, parece un pequeño demonio. El caso es que lleva tiempo molestándome, no me deja hacer vida normal, me tiene como esclavizada. Y, para colmo, me han dicho que no lo puedo tocar, así que me obligo a llevar las manos atadas, para no alcanzar a rozarlo. Por suerte, creo que este Carnaval me podré librar de él. Una sesión más y seré libre.
- ¿Les importa si enciendo la televisión? Está a punto de terminar el partido de España y quiero ver el final- un par de gestos interpretados como "si son solo cinco minutos, adelante"le hicieron levantarse a encenderla- ¡Qué mal se ve la pantalla! Está muy oscura, parece que los nuestros son todos africanos. ¡Y encima vamos perdiendo y nos van a eliminar! Miren, yo mejor lo apago, que había muchas esperanzas en volver a hacer algo grande y al final a casa a las primeras de cambio.

En ese instante entró el doctor preguntando por la primera mujer:

- ¿Eva? Puede pasar. Le confirmó mi compañero la cita de la semana que viene, ¿verdad? Perfecto, pues nos veremos de nuevo. Vamos con su nueva sesión de cirugía...

- ¿Y usted por qué llora?- preguntó la chica de las cadenas- ¿Sigue triste por el partido?
- ¿Qué partido? Ah, no. Bueno sí, es que los jugadores me han recordado al tío que me ha robado a mi mujer de un día para otro. Aún no lo he asimilado, pero lo más grave es que tenía muchas cosas para ella que ahora no le voy a poder ofrecer: un viaje a Punta Cana, unas entradas para El Rey León en Madrid o una operación de cirugía estética. De hecho he venido para aprovecharla yo, así no la pierdo. Era para un aumento de pecho, pero espero que me lo descambien por un vale para otra cosa.
- ¿La echa mucho de menos?
- Cada hora menos, pero sí, mucho. Y yo pensaba que ella me echaba de menos a mí también. Incluso llegué a creer que me había puesto hasta un detective para vigilarme. Ayer me estuvo siguiendo un tipo con gabardina un buen rato. Pero logré despistarlo y no lo he vuelto a ver, no debería ser muy bueno, le queda mucho por mejorar.
- Eso, que practique, que nadie es capaz de triunfar al primer intento. Bueno, yo sí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario